La larga sombra serbia

El muro murciano está empeñado en que su equipo se quede un año más jugando entre los grandes del fútbol español, para conseguirlo intentará hacer que la portería sea lo más pequeña posible a ojos de los delanteros rivales.

Dos años de gloria para el Real Valladolid, dos años en los que se consiguió un ascenso y una salvación relativamente tranquila. Este fue el bagaje de un Djukic a los mandos del Real Valladolid, caracterizado por el buen juego y un equipo que no dejó de competir en ninguna de las treinta y ocho jornadas de liga. Pero todo eso es agua pasada; el técnico serbio decidió poner rumbo a la ciudad del Turia y la preocupación para sustituirle con garantías comenzó a brotar en el Real Valladolid. El principal quebradero de cabeza era continuar con la filosofía del buen trato de balón y para continuar con estos ideales se trajo a Juan Ignacio Martínez, cuya contratación levantó bastantes dudas entre los aficionados del Real Valladolid.

Tras la llegada de la nueva temporada, jugadores, técnico y directiva han llamado a la calma y se han encargado de reiterar que no se va a cambiar el estilo de juego, pero a pesar que la idea sigue siendo la misma los resultados no están acompañando, provocando que los detractores de Juan Ignacio Martínez  estén alzando la voz. A pesar de que las comparaciones son odiosas, son inevitables y son comprensibles , ya que a estas alturas el Real Valladolid sumaba diez puntos, cuatro más que este año, dato preocupante, pues el buen arranque del pucela ha sido uno de las claves de la permanencia. Más preocupante, si cabe, es el dato de que en las dos primeras jornadas de la pasada campaña ya se llevaban los mismos puntos  que este año en ocho jornadas.

A pesar de estos datos, son un poco precipitadas y tienen parte de injustas, ya que las bajas son una de las causas principales de este inicio, seis bajas son las que sufre la plantilla pucelana y no han permitido a Juan Ignacio Martínez contar con su once de gala. Más datos que ponen al actual entrenador contra las cuerdas, es que el bagaje actual es de siete goles  a favor y trece en contra, por lo doce a favor y nueve encajados de la temporada pasada, aunque es un dato poco realista ya que seis goles fueron anotados en el mismo partido contra el Rayo Vallecano.

Puede ser un poco pronto para comenzar con las críticas y poner en duda la figura del actual técnico, pero en mayo se sabrán los resultados. La idea de juego sigue siendo la misma y con la recuperación de la enfermería  lo más probable es que el Real Valladolid mejore, ahí es cuando se podrá comparar a ambos entrenadores, pero la sombra del serbio es muy larga y va a ser muy complicada poder igualarla.